Uno, diez, cien folios
por rellenar y la mente en blanco. Eso era, junto a mi Olivetti heredada de mi
tío y un vaso de Jim Beam, afición heredada de mi padre, todo lo que adornaba
la escena. La música corría a cargo de Metallica, las maldiciones eran todas de
mi cosecha.
Había comenzado a escribir de nuevo, después de una sequía
de más de medio año, y sólo había conseguido dar a luz a unas pocas líneas.
Aunque la historia parecía prometedora, tampoco era como para dar saltos de
alegría. Si acaso un leve movimiento
de cabeza al ritmo de la música.
Volví a releer la última línea una vez más: “¡Mierda! ¡Están por todas partes! —Vociferó la figura a alguien indeterminado, al tiempo que comenzó a correr.” No
había manera, parecía que el problema con las musas volvía, por muchas veces que
la leyera. Quizá era por el tiempo que había estado alejado de las teclas, o
porque a la mayoría de los que se lo había mostrado les había gustado y querían
que la continuara, cosa que no pensaba hacer cuando llegué a esa última línea.
Entre canción y canción, que iban siendo la banda sonora de
mi desesperación, pude escuchar el timbre de la puerta. Miré la hora, ¿quién
podía ser? No esperaba a nadie, y un domingo no suelen trabajar los carteros
comerciales…
Antes de abrir pregunté, como bien me había enseñado mi
madre… y la vida, que algún encuentro
desafortunado había tenido en el pasado.
—
¿Quién es?
—
Aaaarggrgraggggggghhhhhhghghgaaaaa… —Sonó una
voz, entre gutural y sin alma, del otro lado de la puerta.
—
Vamos, no me jodas… Otra vez no… —Bufé con
desgana.
Continúa aquí...
Una de esas musas no deseadas?
ResponderEliminarQué va! Ojalá, ojalá...
Eliminarmmmmmmmmmmm nos vas a dejar con la intriga?
ResponderEliminarmmmmmmm me da que si.... jijijij
EliminarComo es el destino, que ha querido que nos crucemos jsjsjsj tú con tu antigua Olivetti y yo con mi super moderno Twitter. Cuanta gente maravillosa hay en este cacharro de internet ¡¡
ResponderEliminarSin duda, hay gente muy interesante por estos munods virtuales. Encantado de que la Olivetti te haya traido hasta el blog, espero que sigas visitando!!
EliminarSaludos!
Tu máquina de escribir vintage me ha atraído aquí. Ahora solo espero que no nos dejes mucho tiempo esperando la próxima entrega...
ResponderEliminarPues muy feliz de que así haya sido. El domingo o el lunes continuará la historia.
EliminarSaludos y gracias por la visita!
Jajajja, benditas musas!!! No te voy a decir que me gusta, no vaya ser que te meta más presión, aunque te diré, así, en un susurro, que me ha encantado ese giro.
ResponderEliminarNaaa, tranqui, la presión me la suelo meter yo solito... jejeje
EliminarAhhhh, se me había pasado la segunda parte de la historia!
ResponderEliminarClaro que ahora estoy peor que antes. No nos dejes así que nos va a dar miedo abrir la puerta
Ahhhh, se me había pasado la segunda parte de la historia!
ResponderEliminarClaro que ahora estoy peor que antes. No nos dejes así que nos va a dar miedo abrir la puerta